La rebelión de los instaladores de fibra óptica de Telefónica

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Los usuarios que tengan contratado un servicio con Telefónica y quieran instalar fibra óptica en su casa o activar su línea en las próximas semanas tendrán que armarse de paciencia. En Madrid sus clientes quizá ya estén teniendo problemas para encontrar un técnico operativo. Los empleados de las empresas subcontratadas por la compañía podrían comenzar una huelga indefinida después de Semana Santa en protesta por las «condiciones de semiesclavitud» en las que trabajan, mientras que en Madrid iniciaron el paro hace varios días.

Según denuncia a elmundo.es José Ruiz Muñoz, secretario general de Metal, Construcción y Afines de UGT, Federación de Industria (MCA-UGT), el último acuerdo firmado por Telefónica con sus empresas externalizadas rebaja los baremos de pago, precarizando así a los trabajadores de estas compañías. Sus empleados, critica, funcionan «con un sistema de puntos que va en contra del convenio del sector» y que les obliga a trabajar más de ocho horas para poder completar un salario que no supera los 700 euros.

Critica, además, que «no se les paguen los desplazamientos» cuando tienen que realizar algún servicio y que tengan incluso que poner su propio coche y pagar la gasolina. «Estos empleados están sufriendo una precarización salvaje de sus condiciones laborales, pues en ocasiones trabajan siete días a la semana con jornadas que superan las diez horas por menos de mil euros», denuncia.

En Madrid los técnicos empleados por estas compañías externas que realizan tareas para Telefónica iniciaron un paro el pasado día 28 de marzo. La próxima semana los sindicatos de los trabajadores se reunirán con la patronal para tratar de negociar unas «condiciones laborales dignas» y exigir a las empresas «que cumplan los convenios colectivos».

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