Mentira 1: La voluntad de los trabajadores

Para STC, la voluntad de los trabajadores se debe manifestar de forma libre, voluntaria, con privacidad del voto, con todas las garantías que permitan la participación de todos, en las mismas condiciones y ante la misma pregunta y con información real sobre la cuestión a decidir. Para ello solo es suficiente que la mayoría sindical esté dispuesto a realizarlo mediante un referéndum vinculante en sufragio universal, con absoluta transparencia y respeto a todas las opciones que se pretenden decidir. Esto es lo que hace STC en su propia organización y lo que está dispuesto a realizar SIEMPRE con la plantilla en cualquier negociación.

Sin embargo, lo que ha realizado CC.OO. en las asambleas es totalmente distinto y poco tiene que ver con “la Voluntad de los trabajadores”:

  • Las asambleas no estaban comunicadas con la intención expresa de realizar una votación ni como referéndum vinculante (este último debe realizarse mediante sufragio universal).
  • Las votaciones en las asambleas fueron realizadas a mano alzada, en muchos centros con importantes ausencias de trabajadores, en otros con significativas abstenciones y la información facilitada, las formas de comunicar la asamblea y de plantear la consulta fueron muy diferentes entre los centros de trabajo. No se garantizó la posibilidad de participación por igual a todos los trabajadores y con la misma información.
  • CC.OO. realizó una estrategia de desinformación en las asambleas, en base a los siguiente:
    • Que la negociación NO se cerraba el día 31/09 y por lo tanto que se podría seguir negociando conseguir un mejor acuerdo.
    • Que si NO se llegara a un acuerdo, la empresa iba a aplicar de todas formas la última propuesta que nos había realizado
    • Que se podía llegar a un acuerdo sin despidos forzosos
    • Que la mejor opción era la del NO acuerdo y que esto no tendría consecuencias negativas para los trabajadores.
  • Las cuestiones anteriores se demostraron imprecisas (por no decir falsas), pero lo peor es que fueron manifestadas en las asambleas a sabiendas de que eran inciertas, con la intención de manipular la opinión de los trabajadores, tal y como quedó demostrado por las manifestaciones de la Dirección y como vamos a ir demostrando en este escrito.

 

CC.OO. nunca ha realizado un referéndum vinculante global, ni ahora ni antes a toda la plantilla, en ninguna negociación de Convenio ni ERE, ni en Vodafone ni en ONO, y siempre ha firmado estos acuerdos con la Dirección sin realizar previamente un referéndum global. Abanderar “la voluntad de los trabajadores”, no puede ser una actitud circunstancial o coyuntural en función del interés propio, sino que debe ser un compromiso permanente con la plantilla.

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